Doblemente armado
Las caras del icosaedro en que me muevo son un lugar seguro. Un espacio, más o menos amable, de obligaciones y derechos. Una vía transitable. Mi corazón, en cambio, se parece a una ruleta y cuando gira o se tropieza enciende una llama blanca y negra.
El deseo de acercarme a las aristas, de columpiarme en una línea...
Y no sé si hay algo más, si el icosaedro es de arcilla o de cristal, si se puede bucear, atravesar las caras...
En esas caras hay ruido, compromisos y señales que me indican lo prohibido.
En las aristas me imagino el aire puro y en el centro??????? No lo sé. Una nada? Veinte nadas? -no me llaman- Un silencio ordenado? Un misterio circular?
El deseo de acercarme a las aristas, de columpiarme en una línea...
Y no sé si hay algo más, si el icosaedro es de arcilla o de cristal, si se puede bucear, atravesar las caras...
En esas caras hay ruido, compromisos y señales que me indican lo prohibido.
En las aristas me imagino el aire puro y en el centro??????? No lo sé. Una nada? Veinte nadas? -no me llaman- Un silencio ordenado? Un misterio circular?
1 comentario
Nimue y su kaos -